Confirmado: el gobierno de Uribe es un "narcogobierno"

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EL PRESIDENTE (interino) DE COLOMBIA, SU HERMANO JEFE REGIONAL DE LA FISCALÍA, UN JEFE DE POLICÍA, VARIOS FUNCIONARIOS DE LA FISCALÍA y VARIOS INTEGRANTES DE LAS FUERZAS ARMADAS FUERON DETENIDOS POR VÍNCULOS CON EL NARCOTRÁFICO. OTROS TUVIERON QUE ABANDONAR SUS CARGOS.
Un hermano del ministro del Interior y de Justicia de Colombia, Fabio Valencia, fue detenido el jueves por la Fiscalía General que investiga sus supuestos vínculos con un acusado narcotraficante, agravando un escándalo que también ha salpicado a las Fuerzas Armadas.
La detención de Guillermo León Valencia, acusado de concierto para delinquir, enriquecimiento ilícito, violación de reserva, falsedad por destrucción y uso de información privilegiada, se produjo en la ciudad de Medellín, capital del departamento de Antioquia, 220 kilómetros al noroeste de Bogotá. La privación de la libertad se produjo un mes después de que el fiscal general, Mario Iguarán, lo destituyó como jefe regional de la Fiscalía de Antioquia luego de que se revelaron grabaciones que lo comprometían con Daniel Rendón Herrera, alias "don Mario", un acusado narcotraficante prófugo. Por el mismo caso un general de la Policía de Colombia fue destituido, otro presentó renuncia y cuatro efectivos de las Fuerzas Armadas fueron capturados.
En medio del escándalo Iguarán también destituyó a otros cinco importantes funcionarios de la Fiscalía General.
Pese al escándalo y la presión de la oposición, el ministro Valencia, quien actualmente ejerce las funciones presidenciales ante la ausencia de Alvaro Uribe por un viaje al exterior, descartó recientemente la posibilidad de renunciar a su cargo.
Rendón Herrera es un prófugo acusado de ser uno de los mayores narcotraficantes de Colombia y de tener un ejército privado conformado por antiguos combatientes de los escuadrones paramilitares de ultraderecha que depusieron las armas y se desmovilizaron en una negociación de paz con el Gobierno. Las autoridades de Colombia ofrecen una recompensa de hasta 2,3 millones de dólares por información que permita la captura de "don Mario", hermano de un antiguo jefe paramilitar actualmente confinado en una cárcel de alta seguridad.
El Presidente-ministro, visiblemente afectado por la detención de su hermano, dijo que respeta y acata la decisión de la Fiscalía.