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El PS sigue haciendo bromas con los desempleados. Un día después que la ministra Elena Salgado se riera de la Reforma Laboral, la Secretaria de Relaciones Internacionales del Psoe (que no sabe lo que es trabajar) dice que preocuparse por la posibilidad de llegar a los 5 millones de parados es propio del "Club de la Comedia".
De los "brotes verdes" de Salgado al Club de la Comedia de Elena Valenciano. Se afilió a las Juventudes Socialistas con sólo 15 años y desde entonces ha vivido al amparo de la política. Ahora es diputada, secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE y miembro del Comité Federal del partido. Además, es presidenta de la Fundación Mujeres y máxima responsable de la Asociación Aquellos Jóvenes.
Su carrera recuerda a la de la vicesecretaria general del PSOE Leire Pajín, o a la realizada por la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, y sus opiniones tienen el mismo fundamento que el de sus compañeras de partido.
Valenciano ha utilizado su blog en Internet para mofarse de la posibilidad de que en España existan cinco millones de parados y que se necesite una reforma laboral, como advierten el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco de España y la Comisión Europea. Pero en lugar de atacar a estas instituciones ha decidido cebarse en el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro.
Su “artículo” comienza así:
“Sras y sres, amigos y amigas vengo a hacerles un anuncio: ¡¡Estamos a punto de alcanzar los 5 millones de parados!!.Esta intervención no corresponde a un guión del Club de la Comedia. Lo ha dicho Cristóbal Montoro, portavoz de economía del PP, dejando al descubierto de forma impúdica la estrategia política del principal partido de la oposición”.
Valenciano muestra cuál es la estrategia del PSOE para evitar que los ciudadanos se den cuenta de los tremendos errores cometidos por el Gobierno durante los últimos años, especialmente en materia económica.
La consigna primero fue negar la crisis, hablando de desaceleración, luego se le atribuyó la responsabilidad al ex presidente de EEUU, George Bush, después se admitió con timidez que la burbuja inmobiliaria había estallado y culparon de ello a los “especuladores” (en realidad se referían a las familias que compraron casas para venderlas al cabo de unos años).
Ahora el discurso se basa en criticar al PP, analistas, escritores, periodistas, economistas, políticos (algunos de su propio partido) y autoridades europeas.
Para el PSOE hablar de los riesgos del mercado laboral supone un ejercicio de propaganda política. Habría que preguntar a los más de 4,1 millones de parados que existen en España si comparten este enfoque, o a las múltiples pymes y autónomos que se ven obligados a cerrar sus negocios todos los días.
Para Valenciano, temer que se llegue a los cinco millones de personas “es el paradigma de la irresponsabilidad de un partido que, carcomido por un sinfín de casos de corrupción, venganzas y traiciones, en vez de sanearse y remar en la misma dirección que los sindicatos, los trabajadores y los gobiernos europeos, ha decidido jugárselo todo a una carta: que sea la crisis la que resuelva los problemas de falta de liderazgo y sequía de ideas que acosan al PP”.
Con estas manifestaciones Valenciano parece olvidarse del pasado de su partido, lo que resulta extraño, ya que lleva toda su vida bajo el ala del PSOE. Además, esta visión de los problemas del mercado laboral garantiza que los problemas se recrudecerán en el futuro, ya que constata la falta de ideas y voluntad para detener la sangría laboral.
Nada hace prever un cambio de rumbo en el PSOE, ya que los sindicatos más subvencionados de España (CCOO y UGT) le ayudan a contener a las masas. ¿Hasta cuándo?
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