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Las nuevas acusaciones vertidas hoy contra la Embajada de EEUU en La Paz por el presidente boliviano, Evo Morales, al presentar en el Congreso el informe de sus tres años de mandato hicieron que el diplomático estadounidense de mayor rango en Bolivia, Kris Urs, abandonara la cámara.
Las relaciones bilaterales están deterioradas desde septiembre de 2008 cuando Morales expulsó al embajador estadounidense, Philip Goldberg, a quien acusó de dirigir una conspiración contra su gobierno, y EEUU replicó con la misma medida contra el representante diplomático boliviano en Washington, Gustavo Guzmán. Morales afirmó hoy que la expulsión de Goldberg acabó con 'la conspiración democrática, violenta o constitucional' en su país, y criticó la 'doble moral' de EEUU sobre la cooperación con Bolivia que, dijo, 'se traduce en su aparente apoyo a la democracia, cuando en realidad pretende terminar con nuestro gobierno'. Tras esas declaraciones, según la emisora Erbol, el encargado de negocios de la Embajada de EEUU y máximo responsable de la legación tras la expulsión de Goldberg, Kris Urs, abandonó la sesión. Urs criticó a Morales de 'seguir usando a su país como una ficha en su juego político interno', y le pidió respeto. 'No logramos entender', dijo el diplomático estadounidense, que el presidente Morales 'por un lado quiere mejores relaciones y, por el otro lado, siga con acusaciones infundadas y falsas'. 'Si él (Morales) quiere respeto que respete al Gobierno de EEUU. Habla mucho de dignificar Bolivia, pero la dignidad es importante en las declaraciones del presidente', agregó el encargado de Negocios. El portavoz presidencial, Iván Canelas, criticó la salida del diplomático del Congreso, si bien la consideró 'una actitud comprensible' porque 'es un funcionario parte del Gobierno de (George W.) Bush en los EE.UU que ha generado tantos problemas en el mundo' y que trabajó con el embajador Goldberg. Canelas descartó que este episodio afecte a las relaciones bilaterales.
Morales también lamentó hoy que EEUU retirase la ayuda alimentaria a Bolivia.
Estados Unidos canceló a Bolivia los beneficios arancelarios que concede a los países de la región andina como compensación en sus esfuerzos contra el narcotráfico al considerar que falta cooperación de La Paz en esa la lucha contra las drogas.
El Gobierno boliviano ha expresado que confía en que el nuevo presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dé marcha atrás a la medida. Morales celebró en su discurso de hoy la llegada al poder de Obama porque, a su juicio, demuestra que 'los más discriminados, los más humillados, ahora pueden ser presidentes'. 'En este nuevo milenio algo está cambiando y por eso ahora tengo mucha esperanza con el nuevo presidente' de EEUU', agregó.
Morales se mostró esperanzado en que con el nuevo presidente estadounidense mejoren las relaciones políticas y de comercio entre ambos países, pero, dijo, 'no de cooperación' porque 'ellos no necesitan de los bolivianos y nosotros necesitamos de todo el mundo'.
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